Nostalgía..

La semana pasada estuve en el "de efe" y debo confesar que no me agrada mucho viajar a la capirucha, quizas porque cual provinciana que soy me sofocan sus enormes edificios, en escasas ocasiones (para mi fortuna) he sentido temblores de baja magnitud y aunque los he tomado con calma, no he podido evitar que mi corazon se acelere mas rapido de lo que caminan los defeños… ademas la psicosis generada por todo lo que veo en la televisión, me obliga a no ser yo y a camuflajearme como una habitante mas de esa gran selva, por lo que solo me detengo a “turistear” cuando me siento segura.
Afortunadamente, la belleza de la ciudad es mas grande que mis temores y como tampoco se trata de estar encerrada, al segundo día de estancia me “aclimato” y me animo a recorrer mas alla del Starbuck que se encuentra a una cuadra del hotel de siempre…
Me gusta caminar por las calles del centro historico y me gusta, porque desde antes de llegar a Bellas Artes, se comienza a escuchar la musica de los organillos, esas antiguas cajas de madera que son manipuladas por personajes con cara de nostalgia quienes al girar el fuelle hacen sonar melodias llenas de recuerdos que me invitan a jugar con mi imaginacion y pensar que de repente me encontraré en mi andar por esas calles de adoquin a Tintan o Clavillazo y quizas si camino unas cuadras más, posiblemente la "tostada y la guayaba" me pidan un "varo" para seguir con su letargo etilico y a cambio me digan donde queda la carpinteria de "pepe el toro", quien al verme, quizas me confunda con su "chorriada" y me cante al oido “amorcito corazón”… o quizas me encuentro a Borola Burron, quien me detiene para contarme de sus fallidos intentos por sacar a la familia de la pobreza y me pone al tanto de la salud de Gamusita Pilongano, de las atrocidades de Briagoberto Memelas y Juanon Teporochas y pos ya entradas en el chisme, quizas me saque de dudas sobre si Susano Cantarranas sigue de novio con la Divina Chuy… aahhhh, si, ya se que todo esto solo es posible en mi imaginación, pero es que realmente la musica de los organilleros envuelven de nostalgia todas y cada una de las calles por donde transitan…