Tuesday, February 06, 2007

De ecoturismo en Yucatán...
Para mi, no hay nada mas relajante que aprovechar mi tiempo libre admirando y disfrutando de la naturaleza, ya que es algo que llevo en mis genes y en mi profesión, quizás por eso, cuando entre platicas con amigos o conocidos, surgen nombres de sitios desconocidos para mi, me propongo visitarlos en la brevedad posible, claro que esto dependerá de la cercanía y de mis posibilidade$... : (
En esta ocasión un compañero de trabajo entre pasteles y tacos de cochinita, me recomendó visitar dos sitios muy cercanos a la ciudad de Mérida, aprovechando que se aproximaba el puente del 5 de febrero : )
Como existen en el Internet muchas páginas dedicadas a explicar el significado e historia de los sitios que visité, solo me concretaré a narrarles mis vivencias y opinión de ambos lugares…
El primer sitio que visité fueron las grutas de Tzab Nah que se localizan a 30 km. de Mérida, dentro del municipio de Tecoh, dichas grutas, al igual que todo lo que Dios y la naturaleza han creado son hermosas, pero desgraciadamente y pese a que existe un grupo de lugareños que se ha encargado de cuidarlas y limpiarlas para promover el ecoturismo en el pueblo, algunos hijoeputas las han dañado irreversiblemente pintado con grafitti algunas de sus paredes y estalactitas, en verdad que es deprimente ver como un lugar que la naturaleza a tardado miles de años en crear, unos hijos de la tostada lo han destruido en unos minutos… espero que los aluxes existan y las leyendas que se cuentan de ellos también sean verdad, para que los imbeciles que hicieron eso la estén pasando muy mal en estos momentos. Si al hecho de que los grafiteros le han restado belleza al lugar, le agregamos que la guía que nos llevo al recorrido se encontraba medio cruda porque una noche antes se había ido al baile del pueblo (no estoy inventado nada, ella misma me lo contó) y que las linternas que nos dió (ya viene incluida en el precio del recorrido) no iluminaban mas allá de nuestras narices , no me queda otra opción mas que la de no recomendar el lugar, realmente no vale la pena perder el tiempo (una hora de traslado y dos del recorrido), viendo paredes rayadas y estalactitas rotas, todas las linternas estaban deterioradas y no iluminaban lo suficiente como para alcanzar a percibir la belleza de los 13 cenotes, el ultimo de ellos se medio salva porque existe un orificio atificial en el techo de la gruta (hecho en la época del porfiriato para colocar una noria) que ayuda a que la luz muestre algo de su belleza, pero lo mas grave del asunto es que la guia no tiene ni pizca de conocimientos en medidas de seguridad, asi que el riesgo de un accidente es de un alto porcentaje, no es recomendable para personas muy mayores y niños ya que existen lugares demasiado peligrosos donde es necesario sujetarte de una cuerda y jalarte con la fuerza de tus brazos si no quieres caer en uno de esos cenotes… vamos, no es que yo tenga mucha fuerza, pero mi terror a la oscuridad y el instinto de supervivencia hacen milagros en mi persona..: )
Ahora bien si les gusta la espeleológica y el espeloebuceo, este sitio es un buen lugar para practicarlo, pero les recomiendo llevar el equipo adecuado ya que según cuentan los lugareños ya se han petateado algunos turistas en el intento.
El otro sitio, también tiene relación con cenotes, y se localiza en la exhacienda de Chunkanan.
Honestamente para llegar a ella, nos costo algo de trabajo porque me habían dicho que se localizaba en Acanceh (se pronuncia Acanque), cuando en realidad queda más cerca de Cuzumá, y algo que me llamo la atención es que la gente de la zona estaba medio sorda, porque cuando yo les preguntaba...
-disculpe de donde salen los paseos en trucks?, ellos se me acercaban demasiado para escucharme, pero una vez que les repetía la pregunta, ellos rápidamente me respondían con la excelente amabilidad que caracteriza a los Yucatecos…
- ahhhh, es reeeeectooooo, reeeectoooo, siga reeeecto, todo reeeectooooo

Una vez que se llega a Chunkanan, encontrarán la estación de los trucks, los cuales son unos carritos que se utilizaban para transportar el henequen en las epocas del porfiriato y que ahora los han adaptado para comodidad de los turistas, me llamó mcho la atención el nombre de los carritos y para satisfacer mi curiosidad, le pregunte a Don José (nuestro truckero) porque les llamaban Truck y el me explicó que ese nombre no tienen nada de gabacho, sino que en realidad viene del sonido que las ruedas del carrito hacen en las vias (truck, truck, truck, truck, truck), con lo que yo me reí a carcajadas, pero después de 14 km de recorrido en el truck, y un dolor de cabeza, lo entendí a la perfección, incluso comprendí porque la gente del lugar estaba medio sorda…
Pero el trucu, trucu es parte de la emoción que se vive durante el recorrido, aunque no lo recomiendo para los recién operados de la columna (sorry, Iris y Aguilar), ni para aquellas amigas que se han puesto implantes en los senos (no digo nombres), la razón es porque las vibraciones son algo fuertes y constantes y cualquier columna por mas sana que este, lo llega a resentir y pues las bubis son la parte femenina que mas se mueve con el trucu trucu (no es albur)....
Cuando ya íbamos rumbo a los cenotes, se me vinieron a la mente muchas cosas, una de ellas fue la utópica creencia de que había una vía de ida y otra de regreso, por que de lo contrario, como ingados le hacían a la hora de que viniera otro vehículo de frente?... pero conforme fuimos avanzando me respondí yo misma de volada... -ah, pos muy sencillo weyota, los pasajeros que vengan de ida o de vuelta o como aleatoriamente se les pegue la gana, se tienen que bajar para cederle el paso a los que vienen por el otro lado para lo que el conductor tiene que bajar el carrito de las vías y regresarlo a su lugar cuando haya pasado el grupo, según Don José (Mi truckero), los que vienen de la estación llevan la preferencia, así que de regreso, nos toco bajarnos y ayudarle a colocar el carrito (que pesa chingos) en las vias, al menos unas 6 veces…pero tranquilos que eso también forma parte de la diversión!!! …. Honestamente todo el esfuerzos y traqueteo sufrido bien valen la pena porque los cenotes de Bolonchoojol (tipo cerrado), Chansinicche (tipo semiabierto) y el cenote Chelentún (tipo gruta), son hermosos, todos están bien señalizados y tanto los visitantes como los lugareños se han encargado de mantenerlos limpios, el que mas me gusto fue el de Chelentún porque una vez que bajas los 50 escalones te hallarás en una inmensa caverna conteniendo una cristalina y templada alberca de agua natural. Por los nueve agujeros del techo, caen haces de luz que hieren la superficie del agua, proporcionándole un color azul profundo que te invita a zambullirte, pero al menos para mi, la caverna me resulta intimidante, así que solo me dedique a admirarlo...
En fin en el siguiente post, adjuntare algunas fotos que medio muestran ambos sitios y unas partes de zona turistica de la capital de Campeche...

2 comments:

Anonymous said...

Comadre:
Q chido, q chido...y como primero vi las fotos y luego la reseña de su viaje pos más chido todavía...aaah y cómo tmb me fui de adelante pa tras pos estaba a punto de reclamarte lo de "trucks", por un pelo de rana calva y me la pongo como camotito ufffff...jajajaja dije inshe comadre gabashota...saluditos!

kelonya said...

:-) inshe comadre, no le digooooo, por eso nos pasa lo que nos pasaaaa, uuuffff de la que me salve!!!